A mitología griega ha ejercido un influjo profundo e incomparable en la cultura occidental. Desde los dramaturgos, artistas y filósofos de tiempos romanos, pasando por la recuperación por la Antigüedad en el Renacimiento, hasta llegar al presente, todos se han visto inspirados por la sensacional herencia de la antigua Grecia. El origen de estos mitos es imposible de determinar y no exite una versión más veraz que otra de estos relatos. En cambio, cada ciudad del antiguo mundo griego, que se extendía desde el sur de Italia, generó sus propios mitos. Ello puede dar a pie a confusiones, puesto que hay muchas versiones diferentes y contradictorias de estas historias.
Transmitido originariamente, adaptado y desarrollado por tradición oral, el canon básico de dioses y héroes ya estaba establecido cuando los mitos se plasmaron por escrito, aproximadamente en el 750 a.C. La literatura des esta época, en especial las apopeyas de Homero, Iliada y Odisea, y las obras del escritor Hesíodo, constituye nuestra principal fuente de conocimiento de los mitos griegos. La Iliada dramatiza unos cuantos días al final de la mítica guerra de Troya, y la Odisea relata las aventuras de Ulises cuando regresa a casa después de luchar en Troya. La Tegonía de Hesíodo es un poema que se ocupa de los orígenes del mundo y los dioses que lo rigen. Los mitos de creación en la Teogonía muestran grandes afinidades con los mitos de la creación del Oriente Próximo. La mitología griega presenta muchas semejanzas con la indoeuropea y también se vio influida por ella o compartió sus mismas fuentes.